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| Osmar García |
Continuando con el repaso por la actuación de los venezolanos en el baloncesto universitario estadounidense toca revisar cómo les fue a lo de las otras divisiones.
Comenzamos con la División II, en donde participaron cuatro jugadores, empezando el resumen con Osmar García, que disputó su primer año con Lincoln Memorial disputando los 31 encuentros que jugó su equipo, pero teniendo un protagonismo irregular durante la temporada.
García comenzó disputando pocos minutos desde el banco, hasta que su sexto juego cuando estuvo 21 minutos en cancha en los cuales anotó 12 puntos con 5 asistencias, pasando luego al cuadro titular, siendo titular en cinco juegos consecutivos promediando 10 puntos, para luego pasar al banco jugando en la mayoría de los casos menos de 10 minutos.
Sin embargo, al cierre de la campaña lo volvieron a usar con frecuencia, anotando 12, 17, 15, 13 en los últimos cuatro juegos del torneo de su conferencia, en donde cayeron en la final, pera luego en la primera ronda del Torneo Nacional solo pudo anotar un punto en 12 minutos en caída de su equipo.
Finalmente, el ala pívot promedió 6.7 puntos, 2.4 rebotes, con un 54% en tiros de cancha, 25% en triples y 77% en tiros libres en 11.96 minutos.
Quien sí tuvo más regularidad fue
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| Alejandro Redondo |
Alejando Redondo que tuvo una destacada actuación con Chesnut Hill, terminando 12.4 puntos y 8.3 rebotes, tercer mejor anotador y segundo en rebotes de su conjunto, liderando el porcentaje de tiros de cancha con un 48% y en bloqueos con 0.85 por partido.
Redondo fue titular en los 27 encuentros de su universidad, promediando 32 minutos, logrando anotar doble figura en 17 de estos, alcanzando además ocho encuentros con doble dígito en puntos y rebotes.
Su mejor partido fue el primero de 2024, cuando anotó 29 puntos y 15 rebotes ante Holy Famiy, estando 45 minutos en cancha en juego que se fue a tiempo extra, ese juego fue seguido por dos doble-dobles con 18-10 y 12-13.
Otro jugador de la pintura que tuvo una destacada actuación fue
Jhonny Tovar, quien terminó su temporada con 8.4 puntos y 5.7 rebotes con un 54% en tiros de cancha, 41.7% en triples (10-24) y 64.2% en tiros libres, con 1.1 bloqueos, siendo titular en 25 de los 28 encuentros de Felician University
El venezolano, que disputó su año junior, promedió 23 minutos por encuentro, teniendo su mejor juego ante Roberts Wesleyan con 22 unidades con 12 rebotes, teniendo 10-12 en tiros de cancha y 2-3 en tiros libres.
Por su parte el centro
Luis Risquez alcanzó el título de su conferencia con St. Thomas Aquinas, disputando 31 encuentros, con 5.7 puntos, 2.8 rebotes, con un 58.7% en tiros de cancha, 27.8 en triples y 2.8 rebotes.
Risquez fue un habitual en la rotación, con doble dígitos en minutos en 25 de sus encuentros, dos de ellos de titular, en los cuatro años que lleva el centro anzoatiguense ha alcanzado tres títulos de conferencia.
De los venezolanos que estuvieron en el
baloncesto universitario hay que resaltar al escolta
Deiker Padrino, máximo anotador entre los venezolanos, al lograr promediar 16.7 puntos por partido con West Virginia Wesleyan College.
Padrino casualmente jugo en Felician (Casa de Jhonny Tovar actualmente) en sus primeros años, pero con poco protagonismo, promediando menos de 5 puntos por juego. Pero con su nueva universidad logró ubicarse sexto en su conferencia en anotaciones, además de promediar 44.6% en triples, entre los mejores 15 de toda la NCAA en la División II. Esta actuación lo llevó a ser Mención de Honor en su conferencia.
Este jugador no lo teníamos en el radar, pero el periodista Santiago Aceituno logró entrevistarlo para el portal Sports Venezuela, contando que es nacido en nuestro país, emigrando a los tres años de edad.
Desde su primer juego Deiker quiso demostrar que estaba para grandes cosas en la temporada, debutando con 32 y 25 puntos en sus dos primeros juegos, anotando 8 triples en 12 intentos entre los dos partidos. Logrando anotar más de 20 en 11 ocasiones, siendo su tope 35 unidades el 31 de enero con 6 de 8 desde la larga distancia.
El lanzamiento exterior fue su gran herramienta en ataque, siendo eficiente con gran volumen, consiguiendo encestar 3 o más triples en 13 de sus 28 encuentros, estando en blanco desde la larga distancia en solo tres juegos durante la temporada.
Sus números finales fueron 16.7 puntos, 2.9 rebotes, 1.25 asistencias y 1.32 robos, promediando 43.4% en tiros de cancha, 44.6% en triples y 83.5% en tiros libres, en lo que fue su último año como universitario.
Nos queda una última entrega donde repasaremos la actuación de nuestros compatriotas en la División III, la NCJAA y la NAIA.
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