Aún inmaduro, Juan Fontena (Carúpano, 1987) aprovechó el origen de sus ancestros para solicitar la ciudadanía chilena.
Entonces, ya no pertenecía al plantel de Marinos de Anzoátegui y estaba enfocado en sus estudios de Contaduría Pública en la Universidad de Oriente.
“Ni remotamente pensaba jugar básquet aquí (en Chile). No había tramitado la nacionalidad antes por la inmadurez; no estaba consciente de los beneficios de tener la doble nacionalidad”, dijo el sucrense desde Osorno, tras clasificar a las semifinales de la Conferencia Sur de la Liga Nacional del país austral.
“Gracias al agente Carlos Cifuentes, pude venir, conseguir equipo y establecerme con normalidad”, destacó el ala-pívot formado en el programa Transformación de Nuevos Talentos (TNT), filial del Acorazado Oriental.
El jugador oriental no lo piensa cuando se le pregunta en el momento de inflexión en su carrera.
“Jugar Liga de las Américas con Marinos en Xalapa (2014) fue el gran paso en mi carrera. Ser titular en una competencia internacional fue una gran vitrina y creo que gracias a eso estoy establecido hoy en el básquet chileno”.
El interno oriental completó su tercera campaña en el pujante circuito chileno, con registros de 11,1 puntos, 6,9 rebotes y 1,4 asistencias, claves para que Osorno liderara su conferencia con registro de 22 victorias contra 10 derrotas.
– ¿Qué balance hace de esta temporada y de su paso por el baloncesto chileno?
– El básquet chileno me ha dado mucho crecimiento en mi carrera. También el nacimiento de mi hijo, mi pareja, me han ayudado a enfocarme, a madurar, a ser más responsable.
– De su formación en Venezuela, ¿qué aspectos le han resultado más útiles para establecerse en Chile?
– El básquet venezolano me dejó mucha garra, mucha fuerza, jugar física, entrenar duro. Extraño mucho el básquet venezolano porque es más profesional que el de acá.
Han venido muchos venezolanos también últimamente y creo que eso ayuda porque es una vitrina. Lo que me ha ayudado a establecerme aquí es el entrenamiento extra, jugar dando todo y tener pasión por esto, ganas de mejorar y de superarte día a día.
– Inolvidable aquella época de formación en el TNT bajos las órdenes del entrenador Henry Paruta.
– Mis años de formación con Paruta son inolvidables. Te ayudaba en todos los fundamentos y en que uno aprendiera a jugar este deporte, a pensar. Hay cosas de esas que hoy aplico y que me resultan, y cuando las hago me acuerdo de aquellos tiempos. De las cosas que más recuerdo es cuando me decía: “Cuando cojas un rebote, agarra la pelota tan fuerte como si la fueses a espichar”. Me ayudó mucho Paruta, tengo que agradecerle mucho de mi carrera.
– Has roto el molde. Salvo los que se forman en el básquet colegial de Estados Unidos y escasas excepciones, no se consiguen muchos jugadores profesionales que tengan también una carrera universitaria. En tus tiempos en las aulas de la UDO, ¿pensaste alguna vez jugar un Suramericano?
– Con la selección de Chile he vivido un sueño. Jugar en contra de Venezuela en el Suramericano fue uno de los momentos más bonitos de mi carrera. Marcar a figuras importantes de Brasil, de Venezuela, de Argentina… Es un sueño. He hecho muchos sacrificios, es duro estar lejos de tu casa, de tu familia, de los tuyos. Pero afortunadamente he visto los frutos.
– Has tenido la oportunidad que no tuviste en Venezuela.
– En Venezuela antes de venirme tuve la oportunidad de jugar más. No es que no haya tenido oportunidad sino que estaba en Marinos, con mucho caballo, mucho selección nacional, extranjeros de mucho nivel. A pesar de eso siempre estuve ahí, entré en el róster, siempre demostré.
– ¿Es la familia lo que más se extraña estando lejos?
– Se extraña todo: la familia, los amigos, el calor venezolano, las playas. Pero son sacrificios que nos han tocado hacer a muchos de nosotros por tantos problemas que hay en Venezuela y la necesidad propia de buscar un futuro mejor. Es duro estar tan lejos, pero los sacrificios son parte del profesionalismo. Cuando uno se va a otro país, le pasa de todo por la cabeza y el miedo al fracaso se agranda. Pero yo tomé eso como motivación para trabajar más duro y creo que estoy viendo los frutos.
– ¿Ves lejano tu regreso al básquet venezolano?
– Me encantaría jugar en Venezuela. Ojalá más pronto que tarde me den la oportunidad de hacerlo, de reunirme con tantos amigos. Lo que me resta es trabajar duro para estar preparado cuando se me presenten nuevas oportunidades. Ojalá que sea con Marinos porque no me identifico con otro equipo.
– ¿A quién tienes como inspiración profesional?
-Prorrumpe la emoción y espera que no le quede nadie por fuera-. Inspiración personal son Gregory y José Vargas, Diego Guevara, Oscar Torres, Ernesto Mijares, Hernán Salcedo, Leonardo Capparé, Donta Smith y Leon Rodgers, quien ha sido fundamental, porque me ayudó mucho, me aconsejó bastante.
Son admirables por entrega y profesionalismo. Pero mi mayor inspiración es Axiers Sucre por su espíritu, por lo que demuestra, me identifico mucho con lo que hace en la cancha, lo que aporta.
De entrenadores Paruta, Daniel Centeno, que me ayudó en las juveniles de Sucre, Iván García en Liga Nacional y el más importante fue Julio Toro, quien me dio la oportunidad en Liga de las Américas en Xalapa.
“Kike”, como le decían en su etapa juvenil, aprovechó la oportunidad para agradecer a los fanáticos del Acorazado porque “de alguna u otra manera siempre me han hecho llegar sus palabras de aliento”, envió los mejores deseos para la obtención de la 12da estrella en la Liga Profesional de Baloncesto, espera que pronto se acaben tantas vicisitudes que azotan al venezolano en cosas tan elementales como el acceso a comidas y medicinas, y espera coronar su temporada con la consecución de su primer título en el baloncesto austral.
10.2 puntos por juego promedió Juan Fontena en el pasado Suramericano 2016, defendiendo los colores de la selección nacional de Chile.
5.6 tantos registró el ala-pívot sucrense Juan Fontena en la Liga Américas 2014, con el uniforme de Marinos de Anzoátegui.
15.2 fue el average del sucrense Juan Fontena en la serie de playoff, con lo cual resultó determinante para la clasificación de Osorno a semifinales.
1 título con Marinos de Anzoátegui consiguió Juan Fontena. Ahora va por su primera estrella en el baloncesto chileno con el club Osorno.
ElNorte.com.ve / León Aguilar